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Así ha quedado la parte trasera de la pobre Daisy, después de sufrir la ira de uno de los cuatro perros que hay en Can Riera de Vilardell, el pasado sábado, mientras estábamos corriendo por el Montnegre. Que pena de la irreponsabilidad de algunos dueños, así podríamos evitar algún que otro disgusto, porque por lo visto no ha sido ni el primer, ni el segundo perro atacado, además de alguna persona, por éstos perros.
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This is how poor Daisy ended up after being attacked by one of the ferocious dogs who prowl the land around Can Riera de Vilardell last Saturday. She was set upon while out running along a public footpath with Oscar, Bramble and Jimmy. It's scandalous and inexcusable that the irresponsibility of these dog owners has lead to such a savage attack especially as there have been similiar incidents involving people as well as other dogs. Daisy is recovering but will be left badly scarred for life.
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